Nostra casa, el espacio.

La luna brilló... así sin más y por última vez.
Las constelaciones lloraron y lamentaron su partida.
El sol sonrió. La había vencido y se mostraba triunfante.
Nosotros... decidimos que no viviríamos en un mundo sin luna. Nos fuimos con ella. Dejamos de brillar. Entramos a la fría oscuridad del espacio. Ahora vivimos entre estrellas.
Valió la pena.

Ahora lo puedes ver ¿Sabes? Existe el cielo pero lo puedes tocar, existe el mar pero lo puedes alabar...su magnitud, su solidez. Existe la Tierra pero ahora la puedes amar, y existen los demás pero ahora estamos juntos.

¿Qué más puedo pedir?

Lo tengo todo. Tengo las estrellas, Tengo los planetas. Tengo la verdad frente a mí y te tengo a ti.

Somos constelaciones antiguas, ahora lo sé, somos antiguos viajeros, ahora me doy cuenta.

No somos estables, somos nómadas iinfinitos, los guardianes de los soles y los hoyos negros.

Las dimensiones se postran ante nuestra figura, y nuestras guitarras en el espacio se oyen más que nunca, en todas partes, en todos mundos, a toda altura.

Nuestra casa, el espacio.